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Enfermedades neuromusculares (ENM)

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Aunque muchas ENM poco frecuentes, es habitual que produzcan efectos en el aparato respiratorio1, lo que provoca que un número importante de pacientes deban acudir a neumólogos o profesionales de la asistencia respiratoria. Aquí conocerá más detalles acerca de los efectos respiratorios de las ENM, así como sobre la ventilación no invasiva: la principal modalidad de tratamiento para pacientes con insuficiencia respiratoria asociada a las ENM1.

La historia de la familia Beaulieu

Dos de los hijos de Michelle y Steve Beaulieu sufren distrofia muscular de Duchenne, una ENM grave. Descubra cómo, gracias a la ayuda que ofrecen los ventiladores de soporte vital, esta familia sigue recorriendo junta el mundo.

PRIMERA PARTE

Descripción general de las enfermedades neuromusculares

¿Qué son las ENM?

Las enfermedades neuromusculares son un grupo heterogéneo de trastornos neurológicos que afectan directa o indirectamente al funcionamiento de los músculos debido a problemas asociados con los nervios y las uniones neuromusculares1.

Las ENM se pueden clasificar como neurodegenerativas, autoinmunitarias o genéticas, y entre ellas se incluyen la distrofia muscular, la enfermedad de las motoneuronas, la neuropatía periférica y la esclerosis lateral amiotrófica2.

Efectos de las ENM sobre el aparato respiratorio

Las ENM se caracterizan por la debilidad muscular, que puede afectar al aparato respiratorio y tener consecuencias graves.

  • La incidencia de los efectos respiratorios depende del trastorno subyacente; por ejemplo, la insuficiencia respiratoria es habitual en los pacientes con esclerosis lateral amiotrófica (ELA)3.
  • La aparición y la progresión de los efectos respiratorios pueden ser agudas, progresivas o reagudizadas, en función de la ENM1, 3.
  • La insuficiencia respiratoria es la causa más frecuente de morbimortalidad en los pacientes con ENM de progresión rápida4

A continuación, trataremos los tres efectos principales sobre el aparato respiratorio.

Pérdida de fuerza de los músculos respiratorios

Puede producirse una pérdida de fuerza de los músculos respiratorios que conlleve una reducción de la capacidad vital.

Esto se puede deber exclusivamente a la pérdida de fuerza de los músculos inspiratorios, o bien a la combinación con la pérdida de fuerza de los músculos espiratorios y el aumento del volumen residual1.

Anomalías en el funcionamiento de la tos

El funcionamiento de la tos resulta esencial para mantener despejadas las vías respiratorias y evitar infecciones; sin embargo, el deterioro del funcionamiento de la tos es habitual en las ENM.

  • Esto puede ser una consecuencia de la debilidad de los músculos inspiratorios y espiratorios, así como de alteraciones del funcionamiento de la glotis1.
  • Asimismo, se puede producir sialorrea debido a disfunciones del bulbo raquídeo1.

Trastornos del sueño

Debido a la menor eficiencia de la respiración durante el sueño, es habitual que se produzcan trastornos del sueño, que se suelen presentar antes de que se produzcan hipoventilación diurna e insuficiencia respiratoria1.

Entre las manifestaciones nocturnas se incluyen la hipoventilación y los trastornos respiratorios del sueño.

Síntomas

Los síntomas de debilidad de los músculos respiratorios (incluidos el diafragma y otros músculos accesorios) pueden ser inespecíficos, producirse durante la noche (sobre todo en las ENM crónicas) y atribuirse a otras enfermedades3, 4.

  • Entre los síntomas asociados con los trastornos respiratorios del sueño se incluyen los siguientes: ortopnea, interrupción del sueño y dolor de cabeza al despertar3.
  • Los síntomas diurnos de debilidad de los músculos respiratorios pueden ser, entre otros, hipersomnolencia, mayor facilidad de fatiga, infecciones más frecuentes de las vías respiratorias inferiores, disnea (posicional o inespecífica)², taquipnea y disartria3, 5.
  • Entre los síntomas de la tos ineficaz se incluyen una mala eliminación de las secreciones y la neumonía por aspiración.

Descripción general de las enfermedades neuromusculares: resumen

Niño de unos 10 años con enfermedad neuromuscular acostado durmiendo con su máscara y dispositivo terapéutico

Las ENM están asociadas con efectos graves sobre el aparato respiratorio, que pueden manifestarse inicialmente como trastornos respiratorios del sueño antes de que se produzcan síntomas diurnos en aquellos pacientes con enfermedades de progresión lenta. Así pues, ¿cómo se evalúan los efectos respiratorios de las ENM?

SEGUNDA PARTE

Evaluaciones de las ENM

¿Cómo se evalúan los efectos respiratorios de las ENM?

Las pruebas complementarias más adecuadas dependerán del cuadro clínico. En la tabla siguiente se resumen las principales pruebas complementarias y las áreas evaluadas.

  • Es importante que la debilidad de los músculos respiratorios se vigile y detecte de forma temprana para poder iniciar el tratamiento con prontitud3.
  • Una estrategia con una batería de pruebas quizá sea la más apropiada para las ENM, con repeticiones de las pruebas cada 3-6 meses o con mayor frecuencia1.
  • Se requiere disponer de la anamnesis y realizar un examen físico para poder evaluar la debilidad de los músculos asociados con el bulbo raquídeo y de los músculos del diafragma o inspiratorios, así como el funcionamiento de los músculos espiratorios3.

Principales evaluaciones y respectivos resultados en pacientes con ENM1,3,5

Pruebas funcionales pulmonares

Las pruebas funcionales pulmonares se deben realizar en decúbito supino y en posición erguida3.

  • Las mediciones de la fuerza de los músculos respiratorios a lo largo del tiempo resultan útiles; incluyen las presiones inspiratoria y espiratoria máximas y la capacidad vital, incluida la capacidad vital en decúbito supino, que sirve como indicador de la debilidad del diafragma.
  • Una disminución de la capacidad vital >19 % en decúbito supino indica debilidad del diafragma; la pérdida de capacidad vital en los pacientes con parálisis bilateral del diafragma puede ser ≥50 %1.
  • En el caso de las ENM, se ha comprobado que la capacidad vital está correlacionada con el intercambio diurno y nocturno de gases y se prevé que disminuya con el tiempo en las ENM progresivas6, 7.

Presión inspiratoria nasal

La presión inspiratoria nasal puede predecir con exactitud las desaturaciones nocturnas y la insuficiencia respiratoria en pacientes con ENM, así como resultar útil para aquellos pacientes con disfunciones del bulbo raquídeo que no consigan generar un sellado hermético en el espirómetro1.

Síntomas de los trastornos respiratorios del sueño

Entre los indicadores de los trastornos respiratorios del sueño se incluyen la hipersomnolencia diurna, los despertares nocturnos, el dolor de cabeza por la mañana, la pérdida de concentración y los valores altos de CO2 en la sangre arterial, PCO2 telespiratoria o CO2 transcutáneo. Los trastornos respiratorios del sueño se deben confirmar mediante un estudio del sueño1.

Flujo máximo durante la tos

El funcionamiento de la tos se puede medir determinando el flujo máximo durante la tos con un espirómetro o neumotacógrafo1.

Evaluaciones adicionales

Entre las evaluaciones adicionales que se pueden llevar a cabo se incluyen la determinación de las presiones inspiratoria y espiratoria bucales3 y la realización de una radiografía de tórax para estudiar el diafragma.

Evaluaciones de las ENM: resumen

Niño de unos 10 años con enfermedad neuromuscular sentado en silla de ruedas

Es necesario usar una combinación de evaluaciones para medir la función respiratoria. Entre ellas, se incluyen la anamnesis y un examen físico, pruebas funcionales respiratorias, una gasometría arterial y un estudio del sueño. A continuación, abordaremos los tratamientos disponibles para estos trastornos funcionales.

TERCERA PARTE

Tratamiento de las ENM

¿Cómo se tratan los trastornos respiratorios asociados con las ENM?

La estrategia de tratamiento más adecuada depende de la ENM subyacente. La insuficiencia respiratoria puede ser un problema temporal para aquellas ENM que respondan al tratamiento, mientras que otras ENM progresivas pueden requerir ventilación asistida de forma continua.

  • Los tratamientos de respiración asistida mejoran la supervivencia de los pacientes con ciertas ENM, como la ELA, así como la calidad de vida de la mayoría de los pacientes1, 4, 6.
  • Se recomienda realizar un seguimiento frecuente de los síntomas y los trastornos respiratorios del sueño, la hipoventilación diurna y la efectividad de la tos y la deglución1.
  • Se deben consensuar los objetivos del tratamiento de los pacientes, que dependerán de la enfermedad subyacente y la rapidez de la progresión4.
  • En los pacientes con enfermedades incapacitantes crónicas, se debería consensuar un plan avanzado de tratamiento de forma temprana durante el curso de la enfermedad4.

Ventilación no invasiva (VNI) nocturna

La VNI es el método recomendado de ventilación asistida1, 4, y está asociada con una corrección del intercambio nocturno y diurno de gases, una mejora de la eficiencia del sueño y de los síntomas, y un aumento de la supervivencia4, 6, 7.

Inicio de la VNI

Existen múltiples directrices acerca del uso de la VNI, tanto generales como específicas para las ENM8; las recomendaciones acerca del inicio de la VNI varían según las directrices.

  • Por lo general, entre los indicadores para el inicio de la VNI en los casos de ENM se incluyen los síntomas de trastornos respiratorios nocturnos, la hipoxemia durante el sueño, la hipercapnia diurna, una reducción o un deterioro rápido de la capacidad vital forzada (CVF) y una baja presión inspiratoria nasal3.
  • En cambio, los síntomas asociados con el bulbo raquídeo son una contraindicación para la VNI3, aunque se ha comprobado que ofrece beneficios en términos de calidad de vida para esta población de pacientes6.
  • Se recomienda realizar un control nocturno tras el inicio de la VNI7; asimismo, se debe controlar la eficacia de la ventilación asistida1.

Ventilación asistida diurna

En última instancia, puede ser necesario recurrir a la ventilación asistida diurna debido al carácter progresivo de numerosas ENM.

  • Entre los indicadores de la necesidad de ventilación asistida diurna se incluyen los valores altos de CO2 a pesar de la administración de una terapia adecuada del sueño, la disnea diurna y la fatiga o la dificultad para concentrarse1.
  • La ventilación asistida diurna se puede administrar mediante el uso de una mascarilla con un dispositivo binivel, una traqueotomía o una boquilla que permita hablar y comer1, 7.

Modalidades de la VNI

Entre los ventiladores de uso nocturno se incluyen los dispositivos binivel con frecuencia de respaldo. Asimismo, existen modalidades de ventilación asistida binivel con presión de soporte, con control de presión y basadas en el volumen; por ejemplo, las modalidades de presión de soporte media garantizada por el volumen (AVAPS) y de presión de soporte inteligente garantizada por el volumen1, 6.

Ajuste de los parámetros de la VNI

Los parámetros de la VNI se deben ajustar de forma individual para cada paciente:

  • Para la ventilación asistida binivel con frecuencia de respaldo, la presión se suele ajustar mediante un valor inicial de presión positiva espiratoria de las vías respiratorias de 4 cm H2O y una presión inspiratoria que permita obtener un volumen corriente de 6-8 ml/kg (o de alrededor de 8-10 ml/kg en el caso de los niños)1, 7.
  • Se suele utilizar una frecuencia de respaldo de 10-12 respiraciones, que se puede ajustar posteriormente.
  • La presión inspiratoria se puede incrementar progresivamente si los síntomas o los valores diurnos altos de CO21
  • Los biniveles elevados de ventilación asistida (>6,8 ml/kg de peso corporal previsto o 9,0 cm H2O) están correlacionados con una reducción de los valores nocturnos de CO2 transcutáneo en pacientes con ENM de progresión lenta9.

Interfaces para la VNI

La ventilación se puede realizar a través de la nariz, la boca o una combinación de ambas6. Para la VNI nocturna, se suelen utilizar mascarillas, como mascarillas nasales, buconasales o faciales completas, así como dispositivos que generan un sello alrededor de los labios.

  • Por lo general, la elección de la interfaz se realiza según las preferencias del paciente o el médico y en función de las necesidades asociadas a los síntomas específicos. Los recientes avances en estas tecnologías han mejorado la comodidad para el paciente y la tolerancia y el cumplimiento del tratamiento1, 7.
  • En el caso de la ventilación diurna, la ventilación mediante una boquilla puede resultar preferible para aquellos pacientes que sean capaces de tolerar esta interfaz6.

Presión positiva continua en las vías respiratorias (CPAP)

El tratamiento de CPAP está desaconsejado, ya que los eventos de hipoventilación y de origen central son frecuentes1.

Otros tratamientos complementarios

Entre los tratamientos complementarios se incluyen la eliminación de las secreciones y la estimulación de la tos, el tratamiento farmacológico, el reclutamiento de volumen pulmonar y el ejercicio de los músculos respiratorios.

  • La eliminación de las secreciones y la estimulación de la tos se realizan mediante el apilamiento de respiraciones, la tos asistida manualmente o el uso de un dispositivo mecánico de insuflación y exsuflación1, 3, 5.
  • La sialorrea se trata de manera farmacológica con anticolinérgicos o toxina botulínica para reducir la producción de saliva1.
  • Las maniobras de reclutamiento de volumen pulmonar están recomendadas, aunque no existen datos acerca de la eficacia a largo plazo de esta intervención1, 10.
  • El ejercicio de los músculos respiratorios puede servir para aumentar la presión bucal, mejorar el funcionamiento del bulbo raquídeo y la tos, y mantener la flexibilidad de la caja torácica; no obstante, se requieren estudios complementarios para confirmar sus beneficios a largo plazo3, 11.

Tratamiento de las ENM: resumen

Dos niños con enfermedad neuromuscular en silla de ruedas acompañados de sus padres en el campo

La insuficiencia respiratoria es la causa más frecuente de morbimortalidad en los pacientes con ENM de progresión rápida. No obstante, se ha demostrado que los tratamientos de respiración asistida, habitualmente mediante VNI, mejoran la supervivencia y la calidad de vida de los pacientes12, 13. Además, los recientes avances en el campo de las interfaces para la VNI han conseguido que la tolerancia a esta opción de tratamiento sea mayor que nunca14.

En conclusión, la VNI es la base del tratamiento respiratorio para los pacientes con ENM y, combinada con terapias complementarias, ha mejorado las perspectivas para esta población de pacientes.

Este contenido está destinado únicamente a profesionales de la salud.

Referencias:

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